Elogio al zapping
Síntoma de la crisis de sentido de nuestra sociedad, el zapping (1) también augura la nueva estructura mental del siglo venidero.
Sin ningún motivo, el zapping tiene una mala reputación. Se le identifica con la evasión del telespectador frente a la publicidad de la televisión y con un mariposeo de la mente. Sin embargo, el zapping es el símbolo de la libertad mental del telespectador objeto, que escoge escapar a la trampa comercial, o que explora la diversidad de programas. El zapping también es la nueva estructura mental probable del próximo siglo, que sustituirá las virtudes, así como las reducciones de la linealidad clásica.
El zapping opone a la sucesión de secuencias temporales, que sugieren una explicación de causalidad entre el antes y el después, el espacio multidimensional y casi multisensorial de una leonera, de un bazar de informaciones sin secuencia, de un desorden, en el cual se tiene - o no - que descubrir el sentido, o que inventar uno, dejando a un lado los clichés, que a menudo constituían en el pensamiento lineal un verdadero vacío de pensamiento. El zapping mantiene la mente alerta, la provoca por la incongruencia de la sucesión de informaciones no vinculadas que pone en escena. Con relación al pensamiento instituido del racionalismo, el zapping vuelve a cuestionar las ideas establecidas así como la impresión y la traducción de la Biblia a lengua vulgar pudieron desestabilizar el dogma oficial de la Iglesia en los tiempos de la Reforma.
La linealidad reflejaba el orden del mundo, que una sintaxis y una gramática estrictas y autoritarias consolidaban. El zapping hace saltar el orden de la gramática y de la sintaxis, es decir la estructura social y familiar y la arquitectura del mundo. Es libertario y desenvuelto. Se burla de la conveniencia y de la lógica establecida. Es la movilidad de la mente. El zapping es la libertad inventiva de las asociaciones de ideas, la recomposición inédita de éstas. Es más que la macro que une ficheros informáticos. Es la libertad reconquistada de la mente sobre el racionalismo y su grillete rígido.
El símbolo de la nueva cultura
También amenaza con hacer soplar un viento de locura sobre la mente. Es el riesgo de la mente. No hay creación sin riesgo: el de los poetas, de los surrealistas, de los dadaistas, de los inventores, de los investigadores científicos, que desde siempre imaginan y descubren al volver a combinar las ideas establecidas de una manera nueva. El primero que cantó un océano de amor, o inventó los hoyos negros del universo hizo zapping sin saberlo, así como el Sr. Jourdain hizo prosa.
El zapping es el símbolo de la nueva cultura en todos los campos del arte, de la música, de la literatura. Redistribuye las cartas y favorece nuevas formas de pensamiento y de sensibilidad, por yuxtaposiciones inéditas y por la hibridez de su nueva sintaxis sensorial. Sale del mundo cerrado; simboliza la mezcla cultural de la mundialización contemporánea y su estructura heterogénea. Pero los elogios sin matices siempre son excesivos. Hay que recordarlo también: si hay virtudes creativas en el campo de las artes, como lo demuestran bastantes obras de arte, el zapping puede ser fatal en el campo del pensamiento; ya que también puede destruir la fineza y la exigencia del análisis y la dialéctica crítica, sobre las cuales se basa toda nuestra lucidez de hombres libres. Marca una crisis de racionalismo instituido; es el síntoma de la muerte del Bonhomme Système, del cual hablaba Renan, es la señal que anuncia una nueva civilización.
Esta crisis de sentido, unida al poder y a la velocidad de las nuevas tecnologías de información numérica, constituye una verdadera revolución y confronta nuestras culturas y nuestros valores con cuestiones agudas, radicalmente nuevas.
Hervé FISCHER. LIBERATION (8 de febrero de 2000)
Hervé Fischer es vicepresidente de multimedia ciencia y tecnología, Martin International.
Traducción de Erika Gil Lozada
[1] La palabra zapping es un anglicismo de uso muy común en Francia que se refiere al hecho de pasar constantemente de un canal a otro de la televisión por medio del control remoto. N. del T.
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